miércoles, diciembre 24, 2003

Feliz Navidad

Les deseo una muy feliz Navidad y un próspero año nuevo. Me voy unos días de vacaciones.

Ricardo Salinas Pliego

La oleada reciente de escándalos empresariales en Estados Unidos y Europa (el caso de Parmalat es el más reciente) confirma que incluso en los países más "civilizados" los grandes capitanes del sector privado no son blancas palomitas. En países sin estado de derecho, como México, sólo podemos esperar lo peor. Pero incluso para nuestros bajos estándares, Ricardo Salinas Pliego --socio controlador de TV Azteca, Elektra, Unefón y otras--es una oveja muy negra.

El caso de Unefon, por ejemplo, sigue dando de qué hablar. Cuando Salinas Pliego quería formar esa empresa de telefonía celular, no contaba con suficientes fondos. Trajo como socios a la familia Saba, pero incluso no bastó. Terminó obteniendo el dinero forzando, por las malas, a que TV Azteca (y por tanto sus accionistas minoritarios) aportaran dinero a Unefon. Eso dejó un muy mal sabor de boca.

Además, logró que Nortel --una empresa canadiense que fabrica equipo de telecomunicaciones--le prestara dinero a Unefon para financiar la creación de su infraestructura. Como era de esperarse, no pagó. Tras un largo pleito, un grupo de inversionistas privados compró el crédito de Unefon --con un jugoso descuento (la deuda es de 325 millones de US$ y pagaron 107 millones)--a Nortel. Resulta que Unefon volvió a comprar esa deuda por su monto nominal (325 millones), asegurando a esos inversionistas una enorme ganancia sin riesgo.

Pues se acaba de revelar que ese grupo de inversionistas privados estaba conformado por el propio Ricardo Salinas y Moisés Saba. Sin duda alguna, es una transacción totalmente falta de ética, sobre todo porque nunca se reveló al público inversionista que eran ellos quienes adquirieron la deuda. Además, da la impresión que están sangrando a Unefon para beneficio propio. Ante la no muy buena situación financiera de Unefon, parece que están tomando el dinero y corriendo.

Esto es tan sucio que incluso los abogados estadounidenses de TV Azteca rompieron relaciones con esa firma y han reportado a las autoridades estadounidenses este hecho, ya que viola las leyes de ese país (el New York Times ofrece más detalles).

Ricardo Salinas es un hombre talentoso e inteligente. Pero su hábito de pisotear a quienes obstruyen sus ambiciones personales, aunque tengan razones perfectamente razonables para hacerlo, es a la larga contraproducente. Todas sus empresas valen menos de lo que ameritarían sus fundamentos financieros precisamente porque todo inversionista sabe que ser socio de Salinas Pliego implica grandes riesgos. En México, la debilidad de las leyes y de las autoridades implica que sus atropellos han sido concretados con total impunidad. Pero si en efecto violó las leyes estadounidenses, el señor Salinas enfrenta serias consecuencas. Enhorabuena.

viernes, diciembre 19, 2003

El costo de la Navidad

Estoy en medio del poco grato ejercicio de comprar regalos de Navidad. De nueva cuenta, estoy inmerso en la discusión que siempre tengo con mi esposa: yo preferiría regalar certificados de regalo emitidos por diversas tiendas, para que el beneficiado pueda comprar lo que él/ella quiera, mientras que mi media naranja considera que eso es una herejía más negra que adorar a Satanás.

Mi preferencia por los certificados es fácil de explicar: por lo general, los regalos que recibo no son muy de mi agrado. Hubiera preferido recibir el dinero que se gastaron mis benefactores para comprar cosas que sí me gustan. Creo que muchos hombres estarían de acuerdo que es más lógico y práctico. Pero las mujeres ven las cosas de forma diferente: para ellas el regalo no es tan importante en sí mismo; lo que importa es el significado de dar y recibir.

Pero hechos son hechos: hay una importante diferencia entre el valor monetario real de los regalos y el valor monetario subjetivo que les asigna quien los recibe. Incluso hay un estudio que señala que esa diferencia podría superar el 30%, lo cual representa un enorme costo tomando en cuenta la cantidad de dinero asignada a regalos navideños. Todo esto lo tomo de un excelente artículo de John Kay.

¿Qué se puede hacer? Creo que hay un buen punto intermedio: comprar regalos para quienes conocemos biern (y que por tanto corresponderán más a sus gustos) y dar certificados u mercancías apreciadas por todos (la champaña o chocolates finos rara vez fallan) a personas no tan cercanas.

Tacañería a la mexicana

Siempre en estos tiempos me da por reflexionar sobre el hecho de que la sociedad mexicana es una de las más desiguales del planeta. Ciertamente, la falta de equidad tiene raíces profundas, que en algunos casos datan desde la época colonial. No sólo es una cuestión que tiene que ver con tendencias históricas, sistemas políticos y asuntos económicos. La desigualdad también es un tema moral. Y siento decirlo, pero los mexicanos quedamos muy mal en ese aspecto.

La universidad estadounidense de Johns Hopkins publica cifras sobre organizaciones sin fines de lucro de la sociedad civil. En un universo de 35 países, el porcentaje de la fuerza laboral que trabaja, ya sea como empleados o voluntarios, en esas instituciones promedia 4.4%, con un máximo de 14.4% en Holanda (en Estados Unidos se ubica en 9.8%). México ocupa el último lugar, con tan sólo el 0.4% de la fuerza laboral, muy por debajo de países con un nivel similar de desarrollo como Brasil (1.6%) o Colombia (2.4%).

Nuestra falta de generosidad con el prójimo es vergonzosa e inexcusable. Dicen que cada país tiene el gobierno que se merece; en nuestro caso, es difícil argumentar lo contrario.

jueves, diciembre 18, 2003

Nietzsche

Con cierta justificación, la gran mayoría de las personas tiene poco interés en la filosofía, en buena medida porque los filósofos escriben de una forma poco accesible. No obstante, las ideas centrales son interesantes, entendibles y --aunque no sea evidente--tienen una gran influencia en todas las esferas de la sociedad. Aunque Friedrich Nietzsche escribió de forma inusualmente clara y elegante para un filósofo, sus ideas no son bien conocidas y, de hecho, han sido distorsionadas y caricaturizadas con demasiada frequencia. Menciono todo esto porque encontré un maravilloso resumen de algunas de sus principales líneas de pensamiento aquí. Vale mucho la pena.

El debate en torno al TLCAN

El primero de enero del 2004 marca el décimo aniversario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. De acuerdo con un nuevo informe del Banco Mundial, para México los beneficios han sido modestos: si bien el TLCAN generó más exportaciones e inversión extranjera directa de la que se hubieran presentado sin dicho tratado, no ha colocado por si mismo al país en el camino a la convergencia con sus dos vecinos ricos.

El informe señala claramente cuáles fueron los factores que limitaron las ganancias. Cito del resumen:

"Las esperanzas de que México avanzara más para alcanzar a los Estados Unidos fueron disminuidas por una inversión insuficiente en educación, inovación e infraestructura, así como por la baja calidad institucional --un término que incluye la rendición de cuentas, la eficacia de la regulación, el contro de la corrupción y temas relacionados."

Es una severa crítica a la gestión de los gobiernos del país. Lo peor del caso es que sabemos lo que debemos hacer, pero no avanzamos. De hecho, es interesante notar el argumento de Gray Newman, un economista de Morgan Stanley, que afirma que los beneficios del TLC (mayor inversión y exportaciones) le han comprado tiempo a los políticos mexicanos para no atacar los problemas estructurales del país. Claramente, esos flujos extra ya se están agotando; en unos años no bastarán y se tendrán que adpotar medidas urgentes, pero mientras ya habremos perdido varios años.

miércoles, diciembre 17, 2003

Ideas sensatas de Canadá

El nuevo primer ministro, Paul Martin, ordenó una revisión de todo el gasto público por parte de una comisión intersecretarial.

Esta práctica --revisiones por parte de comisiones, que emiten informes públicos--es muy común en las naciones industrializadas. No sé por qué no se emplea en México. Si Fox hubiera convocado una comisión --preferiblemente independiente---desde hace años para revisar el gasto y las finanzas públicas, sus recomendaciones hubieran servido como base para alcanzar acuerdos en estas materias. A final de cuentas, si dicha comisión hubiera recomendado el IVA a alimentos y medicinas, el gobierno no hubiera incurrido el enorme desgaste político de promover esta idea. Además, evitaría que los opositores a la reforma siguieran sustentando cifras y posiciones ajenas a la realidad.

Lamentablemente, es una idea que simple y sencillamente ni es contemplada, aunque sería muy útil para temas como las reformas fiscales y energética.

Secularismo francés y mexicano

A casi cinco siglos de la Reforma y a más de tres siglos y medio del fin de las guerras religiosas en Europa, resulta increíble que en Francia se esté contemplando prohibir todos los símbolos religiosos en las escuelas. Claro, la prohibición sugerida por el presidente Chirac tiene dedicatoria a las niñas musulmanas que se cubren la cabeza, aunque en principio también afecta a cristianos y judios.

Es una barbaridad y un atentado contra la libre expresión. Como agnóstico devoto, yo estoy totalmente de acuerdo en que la instrucción religiosa quede excluida de la educación pública. Pero incluso en esos espacios las personas deben tener el derecho a vestirse como quieran.

Es triste que todavía en Occidente sea difícil la convivencia entre las esferas religiosas y públicas. México no está exento. Nuestras leyes, aunque han sido liberalizadas, todavía imponen fuertes restricciones a la expresión religiosa (por ejemplo, en los medios). Es hora que las personas sean tratadas como adultos capaces de tomar sus propias decisiones. Si la Iglesia Católica quiere decirle a sus feligreses que no voten por un candidato porque apoya el aborto, debería tener el derecho a hacerlo, ya que a final de cuentas son los individuos, en su intimidad, quienes deciden cómo votar.

sábado, diciembre 13, 2003

La desigualdad regional

Los mexicanos sabemos que éste es un país de contrastes. Pero de cualquier forma las cifras nunca dejan de ser impactantes. Si nos muestran las cifras del ingreso por habitante de los estados del sur y después las que corresponden a los estados del norte, da la impresión de que se trata de dos países.

Tomando como referencia el PIB nominal por trabajador en el año 2000, una medida más precisa ya que elimina las diferencias demográficas, los estados fronterizos tienen un nivel promedio de 204 mil pesos por trabajador, mientras que los estados más pobres del sur (Chiapas, Oaxaca y Guerrero) presentan un promedio de 80 mil pesos (el promedio nacional es de 154 mil pesos por trabajador). Incluso el nivel de los estados sureños es engañosamente algo, ya que si eliminamos a los sectores como electricidad y minería, cuya producción es alta en el sur pero que son recursos que no se quedan ahí, el diferencial sería todavía mayor. Lamentablemente, no tengo datos a la mano para ver las tendencias a largo plazo.

¿Por qué una diferencia tan alta? Hay dos factores importantes. En primer lugar, la productividad en los principales sectores de la economía de los estados sureños es baja. Por ejemplo, el PIB agropecuario por trabajador en Chiapas y Oaxaca es menor a 20 mil pesos, mientras que el promedio nacional es de 38 mil pesos y en algunos estados norteños sobrepasa los 100 pesos. En el caso de la industria manufacturera, la productividad laboral en el sur varía de 50 a 90 mil pesos, mientras que en el norte varía entre 130 y 200 mil pesos. Estas diferencias se mantienen en casi todos los sectores.

La baja productividad del sur se puede explicar en buena medida por la falta de inversión, tanto en infraestructura como capital humano, que a su vez impide atraer inversión para elevar la productividad en las industrias. De hecho, si Chiapas y Oaxaca tuvieran el mismo nivel de productividad laboral que el promedio del país en todas sus industrias, su nivel de ingreso por trabajador subiría de un 45% del promedio nacional a casi 70%.

Eso nos lleva al segundo factor. Además de tener un nivel de productividad bajo en sus industrias, su fuerza laboral está concentrada en los sectores donde la productividad relativa es muy reducida. Por ejemplo, la productividad laboral en el sector agropecuario de Chiapas y Oaxaca representa el 40% y 50%, respectivamente, del promedio nacional, el cual es bajo, ya que este es el sector nacional de menor nivel de productividad (menos de una tercera parte de la productividad laboral total). Pero si bien sólo el 17% de la fuerza laboral trabaja en ese sector a escala nacional, dicha proporción sube a más de 40% en Chiapas y Oaxaca. En los estados del norte, menos del 10% de la fuerza laboral trabaja en el campo.

Otro problema de los estados sureños es la geografía. La apertura comercial del país ofrece una ventaja a los estados del norte por su proximidad al mercado estadounidense. Obviamente, este problema no se puede solucionar, pero ofrece otro motivo para favorecer más la inversión en esta parte del país.

Obviamente, el gobierno debe ser el actor principal para remediar estos problemas. Hasta cierto punto, las transferencias a los gobiernos estatales reflejan la necesidad de favorecer al sur, que reciben más qu elos del norte. No obstante, el gasto sólo es parte del problema. Los estados del sur son mucho más perjudicados por los defectos del marco legal y las políticas públicas, como la baja calidad en la educación y las excesivas obligaciones impuestas a los patrones. Además, el centralismo y la falta de una reforma energética lastima más a estos estados, que son los principales generadores de electricidad e hidrocarburos, que a los demás.


En resumen, la falta de avances en las reformas está perpetuando la gravísima desigualdad regional del país. Es una verdadera lástima que este punto ni se mencione en el debate público ni le interese mucho incluso a los gobernadores de esos estados.

Redescubriendo a Arquímides

El NYTimes publica una facinante historia sobre un viejo tratado de Arquímides que hasta ahora estamos entendiendo. Resulta que el bañista más famoso de la historia estaba muy adelantado a su tiempo. Vale la pena.

viernes, diciembre 12, 2003

Visiones contrastantes en el PRD

Es tentador tachar al PRD en su conjunto como una versión del PRI de los años setenta, sólo un poco más democrática y más liberal en cuestiones sociales y culturales. En general, muchos de sus líderes, como Cuauhtémoc Cárdenas, Chayito Robles y Pablo Gómez (su coordinador en la Cámara de Diputados) pertenecen a esa corriente. Como evidencia, basta leer un editorial que publicó este último (advertencia: puede causar nausea).

(Paréntesis: Es patético cómo se critica constantemente al gobierno por elevar el gasto corriente al mismo tiempo que la izquierda lamenta que el gobierno reduce al gasto social. Saben perfectamente que el aumento en el gasto corriente obedece a un alza en el gasto destinado a la educación y programas sociales. Tal como dicen, una mentira repetida mil veces se convierte en verdad).

Estos suelen ser los perredistas que conocemos y detestamos. Pero hay uno que otro más sensato. El ejemplo más claro es el senador Demetrio Sodi, siempre una voz lúcida y pragmática. Pero quedé sorprendido por la reacción de Ricardo Monreal, gobernador de Zacatecas, quien lamentó el rechazo de la reforma. Tengo buena impresión de él y se rumora que buscará pronto el liderazgo del PRD. Ojalá tenga éxito, por el bien del país.

La gran pregunta es dónde se ubica Andrés Manuel López Obrador. Es un gran político, más allá de lo que uno piense de él y de sus acciones. Estuvo en contra de la reforma fiscal, pero de forma discreta (nadie cree su afirmación que con más austeridad el gobierno podría tener el dinero que requiere). Sus instintos parecen ser de la vieja izquierda, pero tiene todo que ganar y nada que perder moviéndose hacia el centro. En ese sentido, será interesante ver qué dice en los próximos días. Además, si piensa seguir esa estrategia con miras al 2006, tiene que enfrentarse a Cárdenas y tomar control del partido, purgando a los elementos radicales y estableciendo alianzas con gente como Monreal. Si no lo hace, es probable que no gane la elección presidencial y, aún si lo logra, tendrá serios problemas para gobernar. Esto tiene que suceder en el 2004. Veremos.

Las reacciones al debacle fiscal

Cuando México aparece en la primera plana de la prensa internacional, por lo general no lo hace por buenos motivos. El Financial Times publicó una nota con un tono muy negativo que seguramente se reflejará en el tipo de cambio y la bolsa el lunes.

También recibí una nota dirigida a clientes de Merrill Lynch (no tengo una liga) muy breve, pero que en esencia también es pesimista. Lo único interesante es que señala que el impacto sobre el tipo de cambio debería ser limitado, gracias a que las reservas internacionales del país están creciendo a un ritmo muy acelerado.

Sin embargo, vale la pena destacar que Jorge Fernández Meléndez, el mejor analista político del país, no sucumbió totalmente al pesimismo. Señala en su columna de Milenio que todavía hay una pequeña ventana de oportunidad para aprobar una reforma fiscal decente. Ojalá tenga razón, pero lo dudo.

¿Otra década perdida?

¿Qué decir sobre los acontecimientos de ayer? Todo parece indicar que no habrá reforma fiscal o cualquier otra reforma en los próximos años. Para la economía, eso implica que no creceremos a más de 3% real anual --el promedio de la última década--y las finanzas públicas estarán cada vez en peor situación.

¿Quién tiene la culpa? En primer lugar, la mayoría del PRI y el PRD (más el PT) que votó en contra, sin hacer intento alguno de hacer una mejor propuesta. El PRI jamás ha tenido muy presente un sentido de deber patriótico y los mejores intereses del país no forman parte sus prioridades, por lo cual esperar que cambiaran de actitud ahora es ingenuo. Es una mafia que busca perpetuarse en el poder. Del PRD, ni que decir, cualquier cosa que no se acomoda a su visión dogmática del mundo --tan limitada como equivocada--es rechazada sin pensar.

Pero Vicente Fox también es muy culpable de ineptitud e ingenuidad. Los priístas le han prometido mucho y jamás le han cumplido. Su respuesta: seguir cortejándolos como si nada. El Sr. Fox no entiende que la política es un juego rudo que requiere palos y zanahorias en igual medida para lograr avances. Si sólo ofrece zanahorias, los priístas las tomarán con gusto y no le darán algo a cambio. Su discurso de anoche parece indicar que por fin le cayó el veinte, pero con tres años de retrazo. Puede olvidarse de cualquier avance significativo en sus tres años restantes de gobierno. Ojalá, por lo menos, entienda que para el bien del país tiene que atacar con todo a Roberto Madrazo de ahora en adelante. Sólo si lastima al PRI podrá existir la posibilidad de que haya acuerdos el próximo sexenio.

Del PAN, el partido fantasma, sólo me queda lástima. No tienen a un personaje --uno solo--que tenga capacidad de liderazgo. En este debate jugaron un papel muy, muy secundario. Cierto, sus instintos son buenos, pero no saben defenderse ni a ellos mismos ni a sus proyectos. Al menos que hagan algo -lo cual parece poco problable-- en el 2006 serán borrados del mapa electoral, dejando al país sin el único partido que de forma más o menos constente ha respetado su compromiso con la sociedad y que ofrece el proyecto más coherente y responsable de largo plazo.

En otras palabras, la única posibilidad que le queda al país es que en el 2006 el priísta o perredista electo como presidente tenga la visión, fuerza y capacidad de lograr los acuerdos para impulsar las reformas. Dados los antecedentes de estos partidos, es poco probable que esto suceda. En ese sentido, enfrentamos la seria posibilidad de otra década perdida más. Ante la apatía de la población y el hecho de que un porcentaje alto sigue apoyando partidos que no ofrecen nada, lo más seguro es que los mexicanos más dinámicos y concientes seguirán votan abrumadoramente....por cambiar de país a través de la emigración.

miércoles, diciembre 10, 2003

China vs. India

Este artículo sobre los modelos de desarrollo respectivos de China e India es lectura indispensable. Presento una breve reseña y algunas reflexiones sobre la relevancia para México.

En fechas recientes, China ha recibido muchísima atención en los medios nacionales e internacionales. Su éxito en términos de crecimiento, tanto de su economía como de sus exportaciones, es temido y admirado en partes iguales. El gigante asiático parece imparable.

No obstante, las impactantes tasas de crecimiento que presenta (cerca de 9% anual en el PIB y más de 30% en exportaciones) esconden serias debilidades. Sus mercados de capitales son ineficientes en extremo, su éxito exportador depende de empresas extranjeras, no ha logrado crear muchas empresas nativas competitivas, no es un estado de derecho y el gobierno sigue controlando buena parte de la actividad económica.

En cambio, India --el otro gigante asiático--es virtualmente ignorado, salvo una que otra nota sobre su industria tecnológica (sobre todo de software) y su desarrollo como una plataforma para el outsourcing de servicios. Además, sus cifras de crecimiento son mucho menos impresionantes (su PIB crece a poco más de 5% anual).

Pero los autores de la nota señalan que su potencial a largo plazo puede superar al de China. Esto debido a que tiene mejores mercados de capital, un sistema judicial funcional y, quizá más importante, ha logrado desarrollar empresas nativas muy competitivas. A esto agregan su fortaleza en tecnología y yo añadiría que cuenta, a diferencia de China, con una amplia población que habla inglés.

Es imposible señalar cuál de los dos modelos es mejor. China está siguiendo el mismo modelo que funcionó muy bien para Japón y Corea. Aunque estas dos naciones enfrentan serios problemas y Japón lleva estancado una década, a final de cuentas son países ricos. Pero al mismo tiempo son países mucho más pequeños, homogeneos y liberales que China, por lo cual las deficiencias del modelo asiático de crecimiento vía exportaciones pueden afectar al gigante antes de alcanzar niveles altos de ingreso. En el caso de India, realmente no hay muchos precedentes debido a las características únicas de ese país. Pero sus fortalezas son impresionantes y, si su gobierno lograra tener mejores políticas públicas (sigue siendo un país mayoritariamente analfabeta), bien podría rebasar eventualmente a China. Sin duda, será una de las grandes cuestiones de las próximas décadas.

¿Y México? Curiosamente, se puede decir que México es un híbrido de estos dos modelos. Si bien en los últimos años ha privilegiado el crecimiento vía exportaciones, es claro que éste ya llegó a su límite. El reto actual es, sin duda, promover empresas muy competitivas en servicios y tecnología (las grandes empresas internacionales mexicanas, como Cemex y Bimbo, se dedican a productos de bajo valor agregado). Eso exige crear una infraestructura educativa de excelencia, que enfatice las ciencias naturales y la ingeniería (tal como sucede en India). En algunos respectos, tiene buenas bases para crecer: la eficiencia del sistema financiero y judicial está mejorando, aunque lentamente, y el país cuenta con una inmejorable posición geográfica.

El pacto migratorio no ha muerto

Uno de los grandes aciertos de la administración de Vicente Fox ha sido su esfuerzo por alcanzar un pacto migratorio con Estados Unidos. Aunque el 11/9/2001 complicó el asunto, hay avances. Nada menos que Tom Ridge, el secretario de Seguridad Doméstica, se pronunció a favor de legalizar a los inmigrantes indocumentados. No creo que suceda mucho antes de las elecciones presidenciales del año entrante en Estados Unidos, pero una vez que pasen, puede haber una buena noticia.

Invertir en cine

Mucho se habla de los problemas de la industria cinematográfica mexicana. El Universal publicó hoy una nota muy interesante que muestra cómo funciona todo el proceso de financiamiento de una película nacional. Vale la pena.

Me llama la atención que, incluso con las cuotas impuestas para exhibir películas mexicanas, sea tan difícil juntar menos de un millón de dólares para financiar un proyecto. Eso indica que los cineastas mexicanos no han desarrollado una fórmula para crear películas que le gusten al público. Pasa lo mismo que se observa en el cine francés: todos aspiran a ser "artistas" en lugar de ser técnicos competentes que producen películas que sólo aspiren a divertir al público.

La peor empresa de México

Así está titulado esta columna de Luis Miguel González en Milenio. Se trata, como era de esperarse, de Luz y Fuerza del Centro. Modestia aparte, aquí lo leyeron primero (ir a parte inferior de la página).

Claro, esta empresa no sólo es un barril sin fondo. El apagón de ayer muestra que incluso todos los subsidios gubernamentales nos compran un pésimo servicio.

Me alegra que por fin este tema esté recibiendo la atención que merece, aunque quienes se oponen a una reforma de este sector por supuesto insisten maliciosamente que el desastre que es Luz y Fuerza del Centro sólo necesita más "autonomía de gestión". La mala fe quedó en evidencia ayer. El Senado aprobó reformas que fuerzan (literalmente) a Pemex a generar cuatro mil megawatts de electricidad en algunos años.

Esto es absurdo. Es un hecho que ni CFE ni la Cia. de Luz y Fuerza tienen dinero para invertir. Pero Pemex tampoco lo tiene gracias a que el gobierno extrae todas sus ganancias. Forzar a la petrolera a invertir en plantas para generar electricidad no resuelve el problema central: el gobierno, en su conjunto, sólo puede financiar inversiones en este rubro endeudándose más (importa poco qué dependencia venda esa deuda), algo poco deseable. Si queremos crecer con estabilidad, lo que se necesita es invertir de forma más balanceada, es decir, una parte tiene que provenir de inyecciones de capital. El gobierno no tiene dinero para ese fin (menos sin reforma fiscal, la cual es opuesta por las mismas personas que no quieren una reforma eléctrica), por lo cual se necesita capital privado.

En fin. Es increíble y deprimente que el discurso político en este tema se sustente en falsedades.

martes, diciembre 09, 2003

Tortura capital: Las manifestaciones en el D.F.

Los habitantes del Distrito Federal están habituados a toda clase de problemas: inseguridad, contaminación, malos servicios públicos, etc. Aunque las llamadas "movilizaciones sociales" que desquician el tráfico, cierran comercios y causan un sinfín de molestias no son el más importante, sin duda son uno de los más irritantes Encontré algunas cifras que ofrece la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno local, que corresponden al periodo marzo 2002-febrero 2003. Lo más destacado:

--En esos doce meses se registraron 1,248 manifestaciones, un promedio de 3.4 al día (aunque hay meses con hasta 4.8 manifestaciones al día). Esta cifra subestima el problema, ya que la gran mayoría se presentan en días laborales, cuando los daños que causan son mayores.

--En esas movilizaciones participaron 476 mil personas, o 348 por manifestación. Pero si tomamos en cuenta que sólo unas cuantas fueron muy numerosas, la gran mayoría seguramente abarca a unas cuantas decenas de participantes.

--El 55% de las manifestaciones fueron del ámbito federal y el resto sobre cuestiones locales. Pero las primeras abarcaron el 80% de los participantes.

No hay cifras que permitan comparaciones en el tiempo o sobre los daños que estas manifestaciones causan.

¿Por qué hay tantas? Creo que hay dos factores fundamentales:

--Político: Bajo el viejo régimen priísta, cuando no había canales democráticos para canalizar demandas y quejas, a veces la única vía para hacerse escuchar eran las manifestaciones (dentro de ciertos límites). Ahora que sí hay una democracia, ésta sigue siendo muy imperfecta y muchas veces no hay canales eficaces para lidiar con problemas sociales. Por ejemplo, la no reelección de los legisladores impide que éstos desarrollen vínculos estrechos con los ciudadanos que representan. Tampoco ayuda la ineptitud de las burocracias ni la tolerancia oficial –en todos los niveles—a actividades ilegales. Asimismo, la fragilidad institucional creó una aversión contra actuar para detener a las manifestaciones más frívolas y dañinas.

--Práctico: Obviamente no hay cifras, pero sospecho que la relación beneficio-costo de las manifestaciones es alta. Por el lado de las ganancias, las manifestaciones muchas veces ofrecen beneficios tangibles de forma muy rápida para los grupos en cuestión o pagan buenos dividendos políticos en términos de visibilidad. En cuanto a los costos, incluso si todos los manifestantes fueran pagados, sacar 10 mil personas a las calles a un costo de 150 pesos por cabeza (más o menos el salario promedio diario) saldría en 1.5 millones de pesos, una cifra muy al alcance de cualquier político, sindicato u organización. Además, en el caso de los trabajadores sindicalizados, no hay sanciones por ausentarse del trabajo, lo cual reduce el costo para los manifestantes.

Para poner fin a esta locura, es claro que nuestra democracia tiene que mejorar y profundizarse. También se necesitan cojones para minimizar los daños que causan, como forzar a que las manifestaciones grandes se lleven a cabo los domingos. Pero eso no es todo. Debe haber un esfuerzo para destapar las fuentes de financiamiento de las manifestaciones, exigiendo transparencia y rendición de cuentas a partidos políticos, gobiernos locales y sindicatos.

Juicios orales

No soy abogado, pero me parece que la propuesta de cambiar el formato de los juicios de escritos a orales será un enorme avance por un motivo muy sencillo: la transparencia. Por definición, un juicio escrito no está abierto al escrutinio del público, de los especialistas y de los medios, lo cual se presta a sospechas y cuestionamientos. Claro, este no es el único y quizá ni el más importante problema del sistema de justicia en México, pero todo avance en esta materia es bienvenido.

lunes, diciembre 08, 2003

Fuga de capitales al re

La "fuga de capitales" es un viejo concepto de los ochentas que, con el cese de los controles sobre transacciones financieras con el exterior y la estabilización de la economía mexicana, ha caído en desuso. No obstante, sigue siendo un indicador interesante que nos puede decir algo sobre la confianza de los ciudadanos en la economía de su país.

Al respecto, es interesante notar que, de acuerdo a datos del gobierno estadounidense, los mexicanos tienen depositados en bancos de ese país unos 30 mil millones de dólares, de los cuales la mitad correponden a instituciones oficiales y bancos nacionales. Tras crecer rápidamente tras la crisis de 1995, ha bajado modesta pero constantemente en los últimos tres años, probablemente reflejando las bajas tasas de interés en dólares. Estamos hablando de unos 300 dólares por habitante, un nivel similar al de Argentina, pero mucho mayor, por ejemplo, al de Brasil.

No obstante, las compras netas de mexicanos de valores financieros de largo plazo a estadounidenses están creciendo, alcanzando un nivel de 10 mil millones de dólares en los primeros nueve meses del año. Seguramente la mayoría de esos flujos reflejan la acumulación de reservas por parte de Banco de México (unos 6 mil millones de dólares). Pero no deja de ser un tanto triste que este indicador, de cierta forma, refleja que se percibe una relativa falta de oportunidades de inversión en el país, lo cual lleva a que los mexicanos inviertan más allá de lo que los estadounidenses invierten aquí.

¿De vuelta a la luna?

Para que la administración de George Bush está seriamente contemplando la idea de iniciar un programa para establecer una base permanente en la luna. Daniel Drezner la evalúa y llega a la misma conclusión que los demás críticos sensatos de la política espacial estadounidense: costaría una fortuna y no ofrece beneficios tangibles.

Valorando a Greenspan

Robert Samuelson, el principal columnista de asuntos económicos de Newsweek, ofrece una perspectiva sensata y oportuna del trabajo de Alan Greenspan. Resumen: ha cometido sus errores, pero ha cumplido bien con el aspecto central de su mandato, mantener la estabilidad económica.

viernes, diciembre 05, 2003

Dato inútil del día: Las películas más taquilleras de todos los tiempos

Como pueden ver, tengo demasiado tiempo libre hoy y eso es una perfecta excusa para entrarle a la triva. Cuando una película es muy exitosa, es inevitable que el monto que recauda en taquilla se compare con los registros históricos. La indispensable Internet Movie Data Base ofrece la lista de las películas más taquilleras de todos los tiempos (ver aquí). El problema es que es una comparación tramposa, ya que no toma en cuenta la inflación.

Es decir, una película que recaudó 100 millones de dólares en 1970 fue mucho más exitosa que una con la misma taquilla en 2002 porque los precios han subido. De hecho, es engañoso ajustar la taquilla por la inflación general, ya que el costo de los boletos de cine ha subido a un ritmo dos veces mayor que la inflación (entre 1939 y 2002 el nivel general de precios subió por un factor de 12.9 veces mientras que el precio de los boletos aumentó por un factor de 25.3 veces).

Con los datos de la IMDB y de la Motion Picture Association of America (MPAA, cuyo sitio ofrece un estudio anual sobre la industria del cine que vale la pena), elaboré una lista de las 10 películas más taquilleras, en dólares (millones), con y sin ajuste por el alza en los precios de los boletos. Los cambios son impresionantes:

L/- Película - Taquilla (s/ajuste) Película -- Taquilla (c/ajuste,$del 2002)
1 Titanic(1997) 1,835 Gone w/ the Wind(1939) 9,864
2 Harry Potter I(2001) 969 Bambi(1942) 5,765
3 Star Wars EI(1999) 922 Titanic(1997) 2,323
4 LOTR Two Towers(2002) 920 Star Wars EIV(1977) 2,079
5 Jurassic Park (1993) 920 101 Dalmatians (1961) 1,886
6 Harry Potter II(2002) 866 E.T. the Extr. (1982) 1,495
7 LOTR Fellowship(2001) 860 Jaws (1975) 1,334
8 Independence Day (1996) 811 Jurassic Park (1993) 1,291
9 Spider-Man (2002) 807 The Exorcist (1973) 1,173
10 Star Wars EIV(1977) 798 Start Wars EV (1982) 1,153

La lista ajustada tiene algunos problemas metodológicos por la falta de datos. No obstante, creo que refleja bastante mejor la realidad que la primera. Todas las películas en la lista ajustada son memorables, mientras que la lista no ajustada incluye churros como Independence Day y Spider Man que no serán muy recordadas en 20 años. El éxito de Gone with the Wind en su momento ha de haber sido verdaderamente impactante: a precios actuales, recaudó cuatro veces más que Titanic.

También es interesante notar que casi todos los géneros de cine, excepto drama, están bien representados en la listas actualizada. En particular, me sorprendió el éxito de películas de terror como Jaws (Tiburón) y The Exorcist. Sin embargo, el género más exitoso ha sido, sin duda, las películas para niños y jóvenes. Con razón Disney es lo que es.

jueves, diciembre 04, 2003

¿Qué pasa con el dólar?

Los estadounidenses aficionados al tinto de Rioja, al brie, a los Porsche y a su viaje anual a Roma sufren: en poco más de año y medio, el dólar ha bajado más de 30% ante el euro. Como estamos acostumbrados a pensar que los movimientos cambiarios miden las fortunas económicas del país, es natural que la caída del dólar sea preocupante para los mexicanos.

¿Pero es el desplome frente al euro una premonición de catástrofes futuras? La verdad no queda muy claro.

Empecemos por lo obvio. Estados Unidos está en una posición endeble: consume e invierte más allá de sus medios. Actualmente, la diferencia entre el ingreso que genera y su gasto es de 5% de su PIB, que en números redondos representa un déficit de más de 500 mil millones de dólares, el cual tiene que ser financiado con capital extranjero.

Durante años, el resto del mundo felizmente envió el dinero. Las principales naciones asiáticas y, en menor grado, las europeas firmaron una suerte de pacto con el diablo gringo: los primeros pospondrían su consumo y enviarían su ahorro excedente a los segundos siempre y cuando los consumidores estadounidenses compraran como si no hubiera mañana. Hasta ahora, estos últimos han cumplido cabalmente con su pacto (la tasa de ahorro de los hogares en EUA es de sólo 3% de su ingreso). Para los asiáticos y europeos, eso a permitido un crecimiento fuerte de sus exportaciones y (en menor grado) de sus economías. Además, esperan que a largo plazo sus inversiones estadounidenses remitan buenos dividendos. Claro, han pagado el precio de la gratificación pospuesta, ya que están ahorrando más de lo estrictamente necesario para financiar su inversión doméstica.

Pero al paso de los años se han acumulado problemas. En primer lugar, los inversionistas extranjeros tienen ya enormes inversiones en activos estadounidenses, por lo cual están expuestos al riesgo (sobre todo cambiario) de una diversificación limitada. Para los europeos, engancharse a la locomotora estadounidense no ha sido muy rentable, ya que su crecimiento ha sido bastante raquítico pese al buen desempeño de sus exportaciones. Además, las tasas de interés en Europa son mayores a las estadounidenses.

Ante esta perspectiva, los europeos están llegando a la conclusión que para crecer necesitan estimular el consumo doméstico y depender menos de las exportaciones. Eso implica que pueden enviar menos capital a Estados Unidos. Por ejemplo, las compras netas de activos financieros de largo plazo de los europeos fueron de casi 30 mil millones de dólares al mes en los primeros ocho meses del año, pero en septiembre se registró una salida neta de 2 mil millones. Esto explica la caída reciente del dólar.

La situación en Asia es diferente. Las principales potencias de esa región son adictas al crecimiento vía exportaciones, el cual les permite alcanzar grandes economías de escala y una creciente competitividad. Como sus ciudadanos ahorran más entre el 20% y 40% de su ingreso incluso si las tasas de interés reales son nulas, es difícil contemplar un crecimiento estimulado por el consumo interno. Eso implica que enganchan sus monedas al dólar y financian una porción creciente del déficit estadounidense.

En ese sentido, mientras Asia esté dispuesta a aportar fondos para que los estadounidenses compren sus productos, el dólar no se desplomará. Pero hay que tomar en cuenta que Europa aporta casi el 40% de las necesidades de financiamiento de Estados Unidos, por lo cual el cese de esos flujos y la caída del dólar son preocupantes.

A final de cuentas, la depreciación del dólar es un mecanismo de ajuste: crea presiones inflacionarias al elevar el precio de los productos importados y, en algún momento, eso elevará las tasas de interés, lo cual afectará negativamente al consumo y la inversión (y al crecimiento de la economía). Hasta ahora, no hay muchas señales de que eso suceda, pero no me sorprendería que la inflación empezara a subir (de un nivel bajo) en los próximos meses. Un alza fuerte en las tasas de interés podría causar una masacre, ya que si se frena el crecimiento estadounidense, los asiáticos bien podrían cambiar de estrategia, haciendo que la caída sea más pronunciada.

No obstante, puede ser que la baja de los flujos europeos sea temporal. Es importante recordar que Estados Unidos tiene dos factores que le favorecen a largo plazo: la demografía (a diferencia de Europa y Asia industrial su población sigue creciendo) y la productividad (que últimamente crece a un increíble 9% anual). Para los viejitos en Asia y Europa, la vitalidad estadounidense seguirá teniendo un enorme atractivo como un medio para balancear el estancamiento de su ingreso con dividendos pagados por inversiones estadounidenses.

miércoles, diciembre 03, 2003

¿Quién dice que hay parálisis legislativa?

Que no les digan, que no les cuenten. Puedo confirmar que, pese a la profunda ruptura dentro del PRI y las disputas partidistas, nuestros legisladores trabajan árduamente para resolver los problemas más apremiantes del país. Por ejemplo, hoy aprobaron una iniciativa para prohibir la clonación humana (supongo que la mera posibilidad de clonar a Elba Esther Gordillo fue suficiente para persuadir a los reticentes). Meras trivialidades como la reforma fiscal, el presupuesto de egresos y similares son temas que pueden esperar hasta el último momento.

lunes, diciembre 01, 2003

¿Qué pasa con el PAN? (Actualizado)

Hace unos días, escribí en este espacio que la verdadera causa de la crisis del PRI y la gran amenaza para su futuro es la falta de una ideología coherente y atractiva. Sin ella, considero, va a ser cada vez más difícil mantener la unión de una institución que es más una colección de intereses individuale y colectivos empecinada en conservar el poder que un partido político.

No están sólos. Aunque el Partido Acción Nacional sí es un partido funcional y no una mafia, también enfrenta una crisis seria, en cierto sentido similar a la del PRI. Imaginemos cuáles eran los principales objetivos del PAN, digamos, hace unos 15 años:
1. Qué México se transformara en una democracia verdadera
2. Qué el sector privado y no el estado predominara en la economía
3. Qué el manejo de la política económica y financiera del país fuera responsable

En buena medida, estos objetivos se han alcanzado (aunque, paradójicamente, en su mayoría durante las administraciones priístas de Zedillo y Salinas). La administración de Vicente Fox es la culminación de este proceso y ha buscado consolidar esas ganancias.

El PAN ganó, abrumadoramente. La pregunta ahora es: ¿qué representa y qué quiere hacer?

Ahí hay un gran hoyo negro. Como buen partido conservador, está bastante contento con hacer avances marginales y no alterar demasiado el status quo. Sin embargo, México es un país relativamente pobre, desigual, inseguro y estancado. La población, en general, reconoce las ganancias de los últimos 15 años pero quiere más. Hasta ahora, el PAN no ha ofrecido una visión clara de qué propone para solucionar esos problemas. Si no quiere repetir su suerte del verano pasado en el 2006, tiene que generar propuestas de cambios y políticas para que el país avance, independientemente de apoyar la agenda de Fox.

Las perspectivas no son buenas. Al igual que todos los partidos, carece de la infraestructura (institutos de estudios, programas para difundir las ideas y políticas de sus gobiernos estatales y locales, etc.) para crear propuestas. Asimismo, sus líderes (como el jefe Diego, Pancho Barrio, etc.) están orientados a la grilla y parecen no mostrar mucho interés en programas y propuestas.

Esto es una lástima, ya que hay muchas áreas que están abiertas a ideas nuevas y no tan nuevas, que son consistentes con la ideología básica del PAN, más allá de las reformas estructurales ya propuestas.

Por ejemplo, creo que la libertad sindical es un tema que combina elementos de democracia y progreso económico. La reforma laboral propuesta/acordada por el gobierno es muy tímida. Hasta donde puedo ver, no hay elementos que ayuden a que los sindicatos sean instituciones representativas de sus miembros, lo cual fomenta el corporativismo priísta/perredista. Incluso no sería mala idea crear una especie de IFE para certificar las elecciones sindicales. Además, la ley debe permitir la libre afiliación. Todo esto fomentaría la productividad y le restaría apoyo a los sectores más oscurantistas de la vida política nacional.

En otro órden, la educación es un tema ignorado en el discurso político, pero de vital importancia. Actualmente, gastamos poco (entre los países de la OCDE, México destina el menor % del PIB a este rubro) y mal (el gasto por alumno en educación superior es más de dos veces el nivel en primaria, aunque los retornos a ese nivel son más altos).

Aquí se pueden manejar dos elementos. Por un lado, permitir que los padres puedan involucrarse más, sobre todo en la vigilancia de los resultados, lo cual requiere información (hasta ahora, no he visto que el Instituto de Evaluación esté haciendo algo útil). Por el otro, se debe crear un sistema para mejorar la calidad, que permita premiar a las escuelas y maestros buenos y castigar a aquellos que no ofrecen resultados adecuados. Incluso se podría explorar la posiblidad de dar becas estatales que puedan emplearse en cualqueir plantel educativo, incluyendo los privados. Cabe notar que cualqueir reforma educativa será opuesta por el sindicato de maestros, por lo cual es necesaria que antes se lleve a cabo una reforma laboral.

Por último, un tema ganador es la calidad de los servicios públicos. Es un área donde hay avances, pero es claro que se necesita hacer mucho. Tal como señaló un informe de la OCDE, un motivo por el cual la informalidad es tan grande es que muchos perciben que la baja calidad de los servicios que reciben los trabajadores formales (salud, pensiones, etc.) no compensa los beneficios (evasión fiscal) del sector irregular.

Lecturas para curiosos

Esta mañana tuve bastante tiempo para leer, lo cual siempre es bienvenido. Aquí van algunas recomendaciones:

1. Marginal Revolution: Un blog de dos profesores de economía que está lleno de información y observaciones sobre toda clase de temas. Uno de mis favoritos y hoy, en particular, está lleno de cosas interesantes.

2. Matrimonio gay: Aunque por obvias razones este tema no es muy relevante en México y en AL, en Europa y en Estados Unidos está desatando un intenso debate, sobre todo a partir de las recientes decisiones judiciales en Canadá y en Massachusetts que afirman que no hay bases constitucionales para prohibirlo. Esta nota de Dahlia Lithwick de Slate es excelente y se acerca mucho a mi punto de vista.

3. Morgan Stanley: El Foro Económico publicado por esa correduría siempre ofrece una perspectiva plural y rigorosa sobre la economía mundial y estadounidense. Vale la pena leerlo los lunes y viernes, aunque casi todos los días hay notas nuevas.

viernes, noviembre 28, 2003

Un poco de automía y ¡presto, problema solucionado!

Esa es la receta de Manuel Bartlett para la industria eléctrica, explotando la creencia que --tal como sucede con Pemex--esas empresas ganan dinero y el fisco se los quita. Esta nota presenta los resultados financieros de las dos empresas estatales. Es un mar de tinta roja. Las cifras de Luz y Fuerza, tal como señalé en otra entrega, hacen que Enron parezca un modelo de prudencia financiera. Por si fuera poco, Bartlett quiere que reduzcan sus precios. No sé por qué, pero me imagino que el programa favorito del senador es "That 70's Show".

¿Qué piensa la población sobre la reforma eléctrica?

Ayer por la noche, la cadena CNI dio a conocer los resultados de una encuesta nacional sobre la reforma eléctrica. Recibe un apoyo casi mayoritario (49%) e incluso la mayoría clara respalda que el sector privado pueda generar electricidad (53%). Asimismo, mayorías claras (poco más de 50%) piensan que la reforma mejoraría el servicio, crearía empleos y no pondría en riesgo la soberanía.

En la nota no dan los porcentajes opuestos, pero en el noticiero anoche, por lo menos en una pregunta, daba la impresión de que se trataba de más o menos una cuarta parte, mientras que el +-25% restante no sabía/no estaba seguro.

Por más que griten y pataleen ciertos grupos, la opinión pública no los respalda. Además, hay que tomar en cuenta que el gobierno no ha hecho un buen trabajo para vender la idea, lo cual podría incrementar todavía más el apoyo.

No conozco una encuesta similar sobre cuestiones fiscales. Pero no me sorprendería mucho si arrojara resultados similares.

Estos números son importantes. Indican que muy probablemente el costo político en estas cuestiones lo pagaran, a final de cuentas, los partidos que se opongan a la reforma eléctrica y no aquellos que las apoyan. En ese sentido, los priístas que lincharon a E.E. Gordillo y los partidarios de Manuel Bartlett están cometiendo un grave error, al pensar que la victoria relativa del PRI en las elecciones pasadas se puede atribuir a su oposición al IVA y las demás reformas. Creo que Gordillo se dio cuenta de esto y buscó la opción negociadora. Sólo eso explica el riesgo que corrió, aunque perdió la apuesta. Lo desafortunado: probablemente están muertas las reformas. Otro sexenio perdido......

El absurdo de la política de inmigración estadounidense

Anne Applebaum es una de las mejores columnistas enfocadas a cuestiones de política exterior en Estados Unidos. Hace poco publicó una columna que explica por qué no se ha podido concretar un acuerdo migratorio. La cita clave:

"O quizá todo tenga cierto sentido: Puede ser que a final de cuentas verdaderamente tenemos la política migratoria que merecemos. No queremos las dislocaciones y fracturas que traería la entrada sin control de ciudadanos extranjeros, sin olvidar las amenazas terroristas, por lo cual creamos leyes estrictas. Sí queremos los beneficios que aporta el trabajo de los inmigrantes, así como la satisfacción de considerarnos una sociedad abierta, por lo cual no hacemos valer las leyes. Así se satisfacen simultaneamente todos nuestros deseos contradictorios y todos estamos felices. Mientras tanto, una sombra, la América ilegal, un mundo de documentos falsos, pagos en efectivo, bandas de contrabandistas, crece cada año..."

Punto crítico I: ¿Qué sucederá con el PRI?

Más allá del affaire Gordillo, el PRI enfrenta una crisis existencial más profunda, que tiene que ver con la falta de una ideología clara. La lucha en las filas del ese partido trasciende las disputas entre sus figuras líderes: es un combate para definir si el PRI regresa a su viejo nacionalismo revolucionario o si define una nueva oferta política, moderna, atractiva y orientada a resolver los problemas actuales del país.

La ausencia de una ideología ha llevado a que PRI sea más una maquinaria electoral y una sociedad mutualista de reparto de poder político y económico, que un partido en el sentido moderno de la palabra. El interés común por obtener cuotas de poder ha sido, incluso tras su derrota en el 2000, el factor que ha permitido mantener la disciplina interna. Sin unidad, la vasta maquinaria electoral del partido se desmoronaría.

Sin embargo, la falta de una ideología pesa cada vez más. Conforme la demografía y la educación erosionan el voto duro priísta, a este partido le cuesta definir una oferta coherente para el electorado. Hasta ahora, han sobrellevado este problema montándose a temas coyunturales (“No al IVA”) o cuestiones locales. Pero incluso el éxito relativo en las elecciones del 2003 muestra que la falta de una oferta concreta le impide realmente recuperar su fuerza: ante la ineptitud de Fox, la recesión, y la ausencia del PRD, el PRI debió haber ganado un porcentaje mucho mayor del voto.

Además, la falta de unidad ideológica asegura que, ante la falta de un árbitro indiscutible (como era antes el presidente), habrá un mayor grado de divergencia en los intereses de los miembros y organizaciones que lo conforman. La crisis actual en torno a Elba Ester Gordillo ilustra este punto perfectamente.

En términos llanos, lo único que mantiene unido al PRI es el dinero, y la maquinaria electoral (el apoyo de las organizaciones como sindicatos y de sus gobiernos locales), que permite que las diversas facciones accedan a su cuota de poder. Pero el dinero escasea gracias a la multa del IFE y la eficacia de su maquinaria electoral es cada vez menor.

Ante esta situación, el PRI enfrenta una elección: definir una ideología coherente, sensata, atractiva para el público y compartida por la mayoría de los integrantes, o fragmentarse paulatinamente (un proceso que ya está en marcha y que inició en los años ochenta con la salida de la Corriente Crítica, encabezada por Cárdenas).

Para bien o para mal, la crisis que surgió esta semana conduce inexorablemente a un momento de definiciones. Si quiere que el PRI conserve su fuerza, Madrazo debe convocar una asamblea para redefinir totalmente al partido y actualizar su ideología como primera prioridad. La otra alternativa, más sencilla, es adoptar, por default, los principios tradicionalistas de Bartlett y Murat. Esto último probablemente propiciaría una fuerte ruptura interna y aseguraría la decadencia del PRI. A final de cuentas, creo que el público que apoya el viejo nacionalismo revolucionario optará por su versión democrática, que representa el PRD, en lugar de elegir la versión que ofrece el PRI.

Incluso si Madrazo opta por la primera alternativa, nada asegura que tendrá éxito y el mismo ejercicio podría agrietar más al partido. Pero la otra opción es todavía peor a largo plazo, aunque el líder actual del PRI quizá considere que es mejor tener un partido más pequeño, pero con mayor cohesión, para su candidatura en el 2006.

Si bien el PRI ha probado tener más vidas que un gato, cada vez se asemeja más a un paciente con una enfermedad crónica y terminal, que lucha por sobrevivir aunque sabe que sus días están contados. En lo personal, soy antipriísta hasta el tuétano, pero me preocupa lo que podría suceder con el PRI. Si retrocede a su concha nacionalista revolucionaria, será imposible concretar cualquier reforma importante, incluso si la facción más moderna e ilustrada se sale de él y busca promover los cambios requeridos.

En ese sentido, aunque me pese, quizá sea mejor que se renueve y sobreviva. Lamentablemente, el PRD sigue entrampado en su tradicional obstruccionismo y su ideología anacrónica, por lo cual difícilmente negociará con el PAN y con el gobierno. Si se divide el PRI, es muy posible que la facción retrógrada establezca una alianza con el perredismo suficientemente fuerte para bloquear todo intento de reforma. En cambio, un PRI renovado tendría que ser, por definición, bastante centrista en su orientación ideológica, por lo cual habría mayores probabilidades de sacar adelante algunos cambios.

No sé que sucederá. Quizá Gordillo y Madrazo lleguen a un arreglo; a final de cuentas, los priístas difícilmente quieren poner en riesgo la maquinaria electoral más duradera y poderosa en la historia moderna. Pero también es posible que sus elementos más decentes y modernistas sepan que un PRI sin cambios es un PRI condenado al fracaso y sientan que hay más posibilidades fuera de él que dentro de él. Ahora sí, todo puede suceder.

Los puntos críticos de México

En estos días se han presentado tantos cambios y noticias en México que es difícil asimilar las implicaciones de tanto movimiento. Como siempre, es más fácil centrarse en los árboles que en el bosque, por lo cual vale la pena reflexionar sobre los puntos centrales que, a mi juicio, determinarán la evolución del país en el mediano plazo. Obviamente, incluirlos todos en una nota sería un exceso, por lo cual pienso hacer toda una serie. Tentativamente, creo que vale la pena empezar por la situación actual y perspectivas de los partidos políticos, para después seguir con los temas económicos y sociales.

Posteriormente, pienso hacer lo mismo con los grandes temas globales.

jueves, noviembre 27, 2003

¿Vale la pena invertir en cemento y ladrillos?

The Economist publicó ayer una nota muy interesante sobre los precios de la vivienda en varios países angloparlantes y unos cuantos más --Estados Unidos, Irlanda, Gran Bretaña, Australia, España, Holanda-- los cuales han subido dramáticamente en los últimos años. Por ejemplo, en los últimos dos, los precios han subido por arriba de 10% real (después de inflación) anual durante los últimos 6 años. Hay varios factores que explican esto: la caída en las tasas de interés, incentivos fiscales, amplia disponibilidad de crédito y la creencia que, tras la burbuja bursátil (curiosamente, estos países destacan por tener una activa cultura de inversión en acciones), invertir en casas es más seguro y rentable.

¿Y qué hay de México? De acuerdo con un imprecindible informe que publica dos veces al año Bancomer (se puede encontrar aquí), los precios de la vivienda, ajustados por inflación, han caído de forma más o menos constante de 1994 al 2002. En total, la caída supera 20% en ese lapso, salvo en las viviendas más costosas (residencial plus), que acumulan una baja real en su precio de sólo 9% Un inversionista que hubiera invertido su dinero en fondos de inversión de deuda hubiera casi duplicado su dinero, incluso después de inflación, en ese periodo. Según cálculos propios de servilleta, incluso rentando e invirtiendo la misma suma que valía una casa en 1994 en esos fondos, saldría ganando.

Esto probablemente refleja tanto la poca disponibilidad de crédito en los últimos años (lo cual está cambiando, pero ese es otro tema) y la elevada competencia en el sector de desarrollo de vivienda. Sea cual sea la razón, la vivienda ha sido una pésima inversión.

Pero los precios de la vivienda son muy cíclicos. Quien hubiera invertido a fines de los ochenta ganó una fortuna a principios de la década pasada. No obstante, las tendencias a largo plazo tanto en México como en Estados Unidos muestran que, en promedio, la apreciación de las casas ronda entre 1% y 2% anual real. A eso habría que restar los impuestos a la propiedad, el costo de la transacción (que en muchos casos supera el 5% del valor del inmueble) y los gastos en mantenimiento. De esa forma, en términos netos el retorno sería negativo, aunque también habría que tomar en cuenta el subsidio fiscal (muy establecido en EUA, reciente y más limitado en Mëxico) a las hipotecas.

En todo caso, creo que a largo plazo hay opciones más rentables, menos fastidiosas e incluso más seguras para invertir, empezando por los bonos. Dicho esto, al menos que la economía mexicana siga igual o peor, a mediano plazo puede ser una opción decente, tomando en cuenta la baja en las tasas, los estímulos al sector y el alza en el poder de compra de los salarios.

Dato del día: Productividad en el sector eléctrico

Pues llegó la famosa "megamarcha" de los sectores y políticos que se oponen a la reforma del sector (que implica una limitada apertura al sector privado). Los números fueron menores a los pronosticados por los oradores y, en un acto de justicia divina, les llovió (literalmente) a cántaros. En fin. La cara más visible de los opositores, el senador priísta y criminal de primer orden, Manuel Bartlett, señala que tenemos una industria eléctrica eficiente que sólo requiere más autonomía para satisfacer las necesidades futuras del país.

En días pasados ya demostré que, tanto en el caso de la Comisión Federal de Electricidad e infinitamente más en el de la Cia. de Luz y Fuerza del Centro, su condición financiera no les permite invertir las sumas requeridas. Pero más allá de ese punto, vale la pena examinar el punto del senador de que es "eficiente".

Tomando información pública tanto de estas empresas como de la Energy Information Agency, resulta que la cantidad de Kilowatts hora generados por trabajador en la industria eléctrica de Estados Unidos es 5 veces mayor a la que presenta la industria eléctrica nacional (quizá más, ya que tomé la producción total mexicana, que incluye las generadoras privadas mas no sus empleados). Es decir, la productividad mexicana en este sector es sólo 20% del nivel estadounidense, lo que probablemente refleja una plantilla excesiva y la poca inversión en el sector en las últimas décadas.

miércoles, noviembre 26, 2003

La democracia es el mejor antídoto para la corrupción

La filial mexicana de Transparencia Internacional, una ONG que lleva a cabo la valiosísima tarea de vigilar y combatir la corrupción, acaba de publicar los resultados de una encuesta a la población general sobre la corrupción. En todos los medios se resumen los resultados (aquí hay un ejemplo). El más destacable es que la frecuencia de actos de corrupción en los servicios públicos bajó 20% entre el 2001 y el 2003.

Es una excelente noticia. Sin duda, refleja el avance de la democracia en el país en términos de una mayor competencia política. A lo largo de las últimos tres años, quedó muy claro que la posibilidad de alternancia es real en todos los estados del país y en un porcentaje muy alto de municipios (incluso en viejas reservas de votos priístas como Chiapas y Tabasco). Ese es quizá el incentivo más fuerte para que los gobiernos estatales y municipales combatan la corrupción: partido que no da buenos resultados es un partido que pierde.

Esto último me lleva a matizar uno de los resultados de la encuesta que más llamó la atención: el ordenamiento de los municipios en términos de la frecuencia de la corrupción. En general, es un indicador muy engañoso. Por ejemplo, resulta que Baja California Sur (que junto con Quintana Roo, Colima, Hidalgo y Aguascalientes son los que menor corrupción presentan) es seis veces menos corrupto que el D.F. (de los más corruptos, junto con Pueba, el Edo. México, Durango y Guerrero).

En algunos casos, el rankeo de Transparencia sin duda refleja cuán corruptos son los funcionarios públicos. Pero me parece que son resultados un tanto sesgados. La encuesta muestra claramente que las infracciones vehiculares son las instancias donde la corrupción se presenta con más frecuencia (en algunos casos, en más del 50% de los casos). Me parece obvio que el D.F. está en los lugares más altos simplemente porque la densidad vehicular es mayor (ojalá que alguien pueda hacer los ajustes relevantes, yo no tengo suficientes datos).

Pero al mismo tiempo, el hecho de que Guerrero sea tres veces más corrupto que Chiapas, cuando ambos estados presentan niveles socioeconómicos similares, sin duda refleja las deficiencias en la administración pública del primero. Claro, además muestran que la transición política en Chiapas ayudó a reducir la corrupción (su frecuencia bajó casi 40%), mientras que el hecho de que el PRI no ha perdido jamás el gobierno estatal en Guerrero sin duda ayuda poco.

Ante esas consideraciones, de todas formas llama la atención que la incidencia de corrupción bajó en 22 estados, dramáticamente en algunos casos, y sólo subió en 11 (con alzas muy importantes en Guanajuato, Puebla, San Luis Potosí y Durango).

Leerlo para creerlo: Subsidiando la informalidad

Increíble, pero cierto. De acuerdo con un fundionario del gobierno del Distrito Federal, el 41% del comercio en la entidad federativa con mayor ingreso del país es informal. Obviamente, eso genera una enorme evasión fiscal y, curiosamente, muestra que aplicar el IVA a alimentos no dañaría mucho a los pobres (los cuales acuden mayoritariamente al comercio informal y no pagan IVA).

Lo escandaloso es que el gobierno local (tanto el GDF como las delegaciones) subsidian a los informales. Cito directamente:

"Israel Clarín [subdirector de planeación y normatividad del GDF] explicó que existen ambigüedades en el Código Fiscal del D.F. que señala una cuota de 9.5 pesos por metro cuadrado para cada locatario, acompañado de "servicios inherentes", término que no especifica qué tipo de servicios debe proveerse a los mercados y tianguis.

Desde el punto de vista de la autoridad, dijo, dichos servicios deberían comprender mantenimiento en áreas comunes, pintura, remodelación, entre otros. Sin embargo, los locatarios "se han colgado de esa ambigüedad para argumentar que que también debe incluir el pago de luz y agua", subrayó......

En un afán de no ocasionar conflictos sociales, el funcionario manifestó que algunas de las delegaciones políticas han absorbido esos pagos sangrando el presupuesto de casi 300 millones de pesos para este año asignado al mantenimiento de mercados públicos."
(El énfasis es mio)

Es decir, no conformes con evadir el pago de impuestos, los informales tampoco quieren pagar el costo de los servicios públicos que consumen. Son una escoria social, pero los burócratas que los cobijan y alientan no mercen ni siquiera ese adjetivo.

(Ed. Es una nota que debería estar en primera plana. El hecho de que no esté ahí dice mucho sobre el lamentable estado del periodismo mexicano, en donde las declaraciones intracendentes de cualquier diputado reciben más atención que noticias reales).

martes, noviembre 25, 2003

Una buena noticia

Cada mes, Banco de México lleva a cabo una encuesta entre empresas manufactureras para ver la evolución de variables como inventarios, producción, ventas, empleo, etc. Inexplicablemente, nadie le hace caso (y Banxico no la difunde). Las encuestas recientes arrojan resultados positivos. Un breve resumen:

1) Producción: El 45% de las empresas señaló que en octubre su producción aumentó, comparado con 33% en septiembre. Eso no es noticia, ya que en ese mes siempre hay un alza importante. Pero es notable que sólo el 14% señaló que bajó su producción, contra 39% en septiembre. Es el porcentaje más bajo en los últimos 7 años. Lo mismo aplica a ventas.
2) Inventarios: En octubre, el 22% de las empresas reportaron un alza en inventarios. De nueva cuenta, es el porcentaje más bajo en muchos años. El exceso de inventarios ha sido un factor que ha deprimido la producción de fines del 2000 a la fecha.
3) Empleo: El porcentaje de empresas que reportaron una baja en su planta laboral se ubicó en 14% en octubre, también un mínimo desde principios de los noventa.

En conjunto, estas respuestas indican que octubre fue, cuando menos, el mes en donde tocó fondo la recesión industrial. Es cierto que todos los indicadores de confianza que miran a los próximos meses ("¿estará mejor su empresa en 6 meses?" y similares) no han mejorado, pero el pesimismo tampoco avanza. No obstante, hay señales alentadoras. En los últimos meses ha subido notablemente el porcentaje de empresas que piensan contratar más y ha disminuido el sentimiento negativo en torno a la conveniencia de invertir.

Si contrastamos esta información con los datos de crecimiento de Estados Unidos, me atrevería a decir que la economía mexicana está en un punto de inflexión: en los próximos meses observaremos un crecimiento más vigoroso en la producción industrial. Sin embargo, todavía no queda muy claro qué tan fuerte será.


Manteniendo la cabeza fría: El riego país

En estos días de fuerte turbulencia política, vale la pena recordar que hay un termómetro que mide, con bastante precisión, las expectativas de los inversionistas en torno a la solvencia de largo plazo del país. Es el célebre "riesgo país", que mide la diferencia entre el rendimiento los bonos del gobierno mexicano emitidos en dólares y sus contrapartes del Tesoro estadounidense. A principios de mes, llegó a un mínimo histórico de unos 195 puntos básicos. Actualmente, ronda cerca de los 215 puntos básicos, cortesía de los berrinches recientes de nuestra clase política.

En estricto sentido, este indicador está relacionado con la probabilidad de que el gobierno declare moratoria con respecto a su deuda extranjera. Puede ir de cero (no hay riesgo alguno) a más de 4000 (como sucedió cuando Argentina cayó en mora). En ese sentido, el alza reciente es muy moderada, considerando que a fines del año pasado el riesgo país estaba por encima de los 300 puntos básicos.

Esto es razonable. Las finanzas públicas del país no enfrentan problemas serios a corto plazo, al menos que baje mucho el precio del petróleo. A largo plazo es otra historia, tomando en cuenta las necesidades existentes de inversión de la industria energética y las pensiones de los burócratas.

En ese sentido, si no hay reforma fiscal, lo que podemos esperar es un alza gradual del riesgo país en los siguientes años. Ésta podría acelerarse dependiendo de lo que suceda en el ámbito político y en los precios del petróleo.

Ojo. El alza reciente ya tuvo consecuencias, como la caída de más de 2% en el precio de las acciones mexicanas y la depreciación del peso. Claramente, los inversionistas piensan que el riesgo país tocó fondo y eso limitará la apreciación de los activos financieros nacionales, por lo cual muchos están liquidando posiciones. Pero tomando en cuenta que las necesidades de financiamiento externo del país son limitadas, dudo mucho que incluso la muerte definitiva de las reformas conduzca a una depreciación más allá de los 12 pesos por dólar.

P.D. Hoy publiqué una nota precisamente sobre el impacto del riesgo país en el valor de las acciones latinoamericanas.


Misteriosa epidemia devasta a la clase política mexicana

México D.F. (Notimexx): A menos de un año del pánico provocado por el SARS, el mundo enfrenta una nueva epidemia que, según los expertos consultados, podría tener un impacto devastador. Este aterrador mal ha sido tentativamente nombrado Insensatez Viral Adquirida de Fox o IVA-Fox, en “honor” a su primera víctima conocida.

Aunque su origen es un misterio, funcionarios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) señalaron que se trata (literalmente) de un desorden del sistema nervioso degenerativo y crónico que afecta a diversas funciones neurológicas básicas.

La OMS ya estableció el cuadro básico de síntomas:

1) El afectado pierde toda capacidad para filtrar sus pensamientos, vocalizando todo pensamiento conciente o inconsciente compulsivamente.
2) Deterioro la memoria de corto plazo. Las víctimas suelen decir algo y al día siguiente lo desmienten, argumentando un punto de vista diametralmente opuesto.
3) Incapacidad para fijar prioridades, seguir planes o controlar subordinados.
4) Delirios de persecución. Las víctimas suelen pensar que entes intangibles, como los “medios”, los persiguen día y noche.
5) Por último, comportamiento errático, inestable y autodestructivo. Los infectados manifiestan conductas extrañas, como atacar a amigos y mostrar mucha generosidad a enemigos declarados.

Las tomografías tomadas a las víctimas muestran el claro deterioro de partes de su cerebro. Revisiones físicas también muestran reblandecimiento de la espina dorsal y el encogimiento de otras partes sensibles de su anatomía.

Según los expertos, el contacto humano directo es el medio de propagación del virus y éste es extremadamente contagioso. Eso explica por qué la esposa del primer infectado, el staff de Presidencia y todo el gabinete fueron los primeros en manifestar los síntomas del IVA-Fox. Incluso los dirigentes del principal partido de oposición, el PRI, que en semanas recientes se reunieron varias veces con el presidente, también se contagiaron con una sepa particularmente fuerte de este virus.

Si bien parece que la epidemia se limita a la clase política mexicana, especialistas de la OMS advierten que se podría propagar a la población en general y a escala mundial. Para evitar el contagio, recomiendan evitar todo acto público en el que participen políticos. Los reporteros y otros grupos vulnerables deben usar guantes y tapabocas cuando estén en presencia de esos funcionarios.

Hasta ahora, no se conoce cura alguna para este mal. El peligro que representa ha llevado a que varios expertos recomienden que toda la clase política sea aislada en cuarentena. Sugieren que lugares como Guantánamo en Cuba, Corea del Norte, Irak y Afganistán serían idóneos.

“Es cierto, es una medida extrema, pero necesaria. La cuarentena tendrá que ser indefinida hasta que se descubra una cura. Estoy seguro que la gente ni se daría cuenta de su ausencia”, señaló un especialista que solicitó conservar el anonimato.

El hecho de que la ciencia médica no haya podido establecer el origen de esta enfermedad, pero eso no ha impedido ciertas especulaciones.

Juan Grillo, destacado politólogo, sospecha que esta enfermedad tuvo sus orígenes en el Partido de la Revolución Democrática. Señala que la mayoría de sus cuadros presentan desde hace años síntomas psicóticos similares a los que ahora manifiesta Vicente Fox. “El deterioro mental de los perredistas, como evidencia la reciente alianza entre Cuauhtémoc Cárdenas y Manuel Bartlett, muestra cuán peligroso puede ser el IVA”, afirma Grillo.

De acuerdo al académico, este mal afecta incluso a Andrés Manuel López Obrador. “Si bien sus síntomas son más leves, el hecho de que convoque conferencias de prensa diarias, aunque no tenga nada relevante que decir, claramente delata su condición.”

Fuentes del PRD rechazan esta teoría. Señalan que el IVA-Fox es un complot de la CIA para convertir a México en el patio trasero de Estados Unidos. Añaden que, gracias a una vacuna secreta desarrollada en Cuba, ellos son los únicos que no están infectados.

lunes, noviembre 24, 2003

Libre comercio: El desastre que se avecina

Una no es ninguna. Por lo menos es lo que yo y muchos otros pensaban cuando Estados Unidos decidió imponer hace un par de año barreras a las importaciones de acero. A final de cuentas, incluso presidentes con buena disposición al libre comercio, como George Bush padre y Bill Clinton, llegaron a hacer lo mismo por motivos políticos.

Pero horas después de que la OMC dictaminó que esas barreras eran ilegales, la administración Bush impuso cuotas a las importaciones de ciertos textiles chinos. Dos medidas de este tipo disparan alarmas, sobre todo cuando en el congreso estadounidense hay propuestas legislativas para imponer tarifas a todas las importaciones chinas.

Por si fuera poco, llega la noticia de que las negociaciones para el Área de Libre Comercio de las Américas dieron un pésimo resultado. Al parecer, el acuerdo consistió en que las negociaciones para hacer un acuerdo hemisférico están prácticamente muertas. En cambio, se privilegiarán acuerdos bilaterales que, todo mundo concuerda, son un medio inferior para impulsar el libre comercio. Los brasileños, que nunca han sido muy entusiastas de la apertura comercial (lo cual explica en parte su pésimo desempeño en materia de crecimiento), están felices. Pero tristemente parece que los estadounidenses también. A ellos les conviene esta modalidad de apertura, ya que en pactos bilaterales tienen mayor poder de negociación.

En otras palabras, la principal potencia del planeta considera que vive en un mundo suma cero, donde lo que gana uno lo pierde otro. Ese es el mensaje que envía tanto su política exterior como su política comercial. Ahora, todos los avances materiales y políticos producto de la cooperación internacional a lo largo de más de 50 años están en riesgo. En ese sentido, George Bush es una amenaza mucho mayor para el mundo que Osama bin Laden.

sábado, noviembre 22, 2003

De computadoras y autos o por qué no crece México

En los últimos tres años, ha estado de moda afirmar que la economía mexicana es una especie de eco amplificado de su contraparte norteña: si le va mal a esta última, a la primera le va peor y lo mismo aplica cuando crecen. Ahora que el PIB estadounidense aumentó 3.2% con relación al mismo periodo del año pasado, el contraste con las cifras mexicanas, que muestran una expansión de tan sólo 0.4% en el mismo lapso, es penoso. Al parecer, la locomotora estadounidense ya salió de la estación, pero olvidó jalar al vagón mexicano.

No hay una explicación sencilla de por qué va tan mal la economía mexicana. Sin embargo, es claro que el desempeño de la actividad manufacturera –precisamente el sector que vincula a ambos países directamente—tiene mucho que ver. Al respecto, con relación al tercer trimestre del año pasado, la producción manufacturera mexicana bajó 3.6%, mientras que la estadounidense se contrajo sólo 0.7%.

Lo curioso del caso es que una revisión a las cifras desagregadas muestra un hecho curioso: en 7 de los 8 grandes sectores (dejé fuera otras manufacturas, las cuales son de poca importancia), la producción manufacturera mexicana presenta un desempeño mejor o, como mínimo, similar a las cifras estadounidenses. La única excepción es la categoría de productos metálicos, maquinaria y equipo. En ese caso particular, en los primeros ocho meses de este año la producción mexicana cayó 7.2% anual, mientras que la estadounidense subió 4.5%.

Dentro de esa categoría hay dos rubros en donde las diferencias entre ambas naciones son notorias. El primero es la producción de vehículos y partes. En México, la producción de vehículos bajó 10% en los primeros ocho meses del año y en partes se registró un alza de 0.5%. Por su parte, en Estados Unidos se registró un alza, en total, de 1.3%. Como he señalado previamente, el mal desempeño de la industria automotriz mexicana se explica en buena medida por mala suerte: los vehículos producidos aquí se han vendido mal y la mezcla general –más autos que camionetas—es desfavorable dadas las condiciones en el mercado. Con un poco de suerte, esta tendencia puede revertirse.

Pero la que más me llama la atención es la categoría de aparatos y equipo electrónico. En Estados Unidos, la producción de aparatos de procesamiento de información aumentó 13% en el año, mientras que otros aparatos electrónicos registraron una caída de 4%. El alza en computadoras y similares explica por sí misma el fuerte repunte en toda esta rama manufacturera. En México no se identifica por separado la producción de equipo de computación, pero el rubro general al que pertenece registró una baja de 15%.

¿Por qué una diferencia tan fuerte? La falta de datos no permite dar una respuesta definitiva, pero me parece que se trata de una cuestión de medición. En Estados Unidos las cifras de producción de equipo de cómputo son ajustadas para reflejar las mejoras en calidad. Por ejemplo, una computadora dos veces más poderosa que la producida el año anterior cuenta el doble. En cambio, en México no se hace ese ajuste y las cifras de producción sólo toman en cuenta las unidades producidas. Si tomamos en cuenta que el poder de las computadoras sube casi 30% al año (dato que tomé de otra parte), ese ajuste explica toda la diferencia.

Concluyendo, estas cifras indican que el desempeño de la economía mexicana no es tan desfavorable. Dentro de la industria total, sólo dos rubros muestran un desempeño sustancialmente peor al estadounidense. En un caso, automóviles, se puede atribuir a factores coyunturales. En otro, es una cuestión de metodologías de medición. Es interesante notar que esto último prácticamente asegura que la producción industrial en Estados Unidos seguirá creciendo más rápido que en México, aunque sea una ilusión estadística.

viernes, noviembre 21, 2003

El mercado matrimonial

Siempre he leído con profundo escepticismo a quienes denuncian la vida moderna como "alienante". Por ejemplo, mi suegro insiste que sólo podemos ser felices si vivimos en un rancho sembrando maíz. No obstante, cuando uno se entera de libros como éste, que le promete a las mujeres que pueden concontrar marido empleando las técnicas que la autora aprendió en su maestría de negocios, la verdad es que los antimodernistas empiezan a sonar razonables. A final de cuentas, recomendar que nos vendamos como "marcas" provoca risa, pero claramente hay muchos a quienes les parece perfectamente razonable.

Bonos respaldados por hipotecas

Hipotecaria Su Casita e Hipotecaria GMAC están a punto de colocar el primer bono respaldado por hipotecas en la historia del mercado mexicano. En esencia, estas dos instituciones están vendiendo hipotecas al público inversionista (Afores, fondos de inversión, aseguradoras, etc.).

En Estados Unidos, esta clase de bonos es casi tan grande como la deuda pública. Sin duda, su emisión en México ayudará a profundizar el mercado local y a fomentar la construcción de casas (los recursos que reciben las hipotecarias por su venta se destinan a nuevos préstamos).

Mi única preocupación es que en México el monto de ahorro nacional es bajo y limitado. Si repunta la emisión de bonos hipotecarios, bien podría "dejar fuera" a emisiones de sectores más productivos (recordando que la construcción de casas no aporta nada a la ampliación de la capacidad productiva de un país). Ahora bien, quizá simplemente sustituyan a financiamiento bancario, lo cual no sería malo. Pero en general es una muy buena noticia.

miércoles, noviembre 19, 2003

La bolsa y la economía: señales cruzadas

Pese a que hoy cayó más de 2%, el principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores acumula una ganancia superior a 30% en el año. Al mismo tiempo, la economía mexicana sigue moribunda: en el tercer trimestre del año registró un alza de 0.4% con relación al mismo periodo del año pasado. Según las malas lenguas, a este paso no se cumplirá la meta de 7% que fijó Fox.....sumando todo el crecimiento en el sexenio. Lo peor es que con la aparente muerte de la reforma fiscal, el futuro tampoco pinta mucho mejor.

Cabe notar que las utilidades de las empresas mexicanas muestran una tendencia similar al PIB: apenas crecen. Ante esta evidencia, algunos se preguntan si el mercado está presentando una especie de burbuja irracional.

La respuesta es negativa. De hecho, es fácil explicar porqué ha subido tanto la bolsa. Hay que recordar que el precio de las acciones refleja dos factores fundamentales: las utilidades que generarán las empresas en el futuro y el valor de las mismas en el presente, el cual se determina desconando las utilidades estimadas con una tasa que refleja su riesgo relativo. Esa tasa depende, a su vez, de la tasa de interés libre de riesgo (en bonos del gobierno) y del riesgo adicional causado por la incertidumbre y variabilidad inherentes en el precio de las acciones.

En cuanto a la tasa libre de riesgo, la medida más adecuada es la tasa real (después de inflación) que ofrecen los Udibonos. Hace un par de años estaba en 7 % y un año atras se ubicó en 6%. Actualmente, está en 3.9%. Una regla de dedo que más o menos se observa en la práctica es que la tasa de descuento para las acciones es dos veces superior a esta tasa, por lo cual pasó de 12% anual real a 7.8% anual real. Esta caída por sí misma explica el alza en el precio de las acciones, ya que las expectativas de crecimiento de las utilidades a largo plazo no han cambiado (incluso se podría argumentar que han bajado).

¿Qué explica la caída en la tasa real de largo plazo? Hay varios factores. Uno es que se percibe que hay una ferrea disciplina fiscal, la cual se espera que trascienda los cambios de gobierno. Al mismo tiempo, el perfil de la deuda pública ha mejorado notablemente (tiene un plazo mayor y la deuda externa, siempre la más peligrosa, sigue bajando). Por último, ante las bajas tasas de rendimiento que ofrecen los bonos de los países industrializados, ha fluido capital a los países emergentes, reduciendo sus tasas de interés.

Todo esto es positivo. Sin embargo, es claro que sin una reforma fiscal la situación de las finanzas públicas en México tenderá a deteriorarse, elevando las tasas de interés. Al mismo tiempo, una vez que las tasas suban en EUA y Europa, bien podría fluir menos capital a los mercados emergentes. Por lo mismo, al menos que empiece a mejorar la perspectiva de crecimiento del país, es cada vez más probable que el mercado no pueda sostener su valuación actual.

martes, noviembre 18, 2003

Los pobres apoyan la globalización

El Pew Research Center, una organización que lleva a cabo encuestas de opinión en todo el mundo, acaba de publicar una encuesta muy interesante, aplicada en 44 países (el resumen puede ser visto aquí). Toca muchísimos temas, pero siguiendo con mi tema de los últimos días, también hace referencia a la globalización. Hay resultados sorprendentes.

Si bien la gran mayoría de las personas consideran que la globalización en todos sus aspectos es positiva, en el ámbito comercial sorprende que los más ardientes proponentes del comercio internacional son .... las poblaciones de los países africanos, que sigue siendo la región más cerrada al comercio. En otras palabras, los pueblos a quienes los globalifóbicos quieren "defender" son precisamente los que rechazan a esa bola de niños ricos malcriados. Con toda razón.


Lo más alentador (cito): "Las personas en todo el mundo tienen una mayor inclinación para darle crédito a la globalización por las condiciones que han visto que mejoran, como una mayor disponibilidad de comida en las tiendas y medicinas y tratamientos modernos". El estudio también menciona que en la mayoría de los países las personas atribuyen, correctamente, la causa de los principales problemas nacionales a causas internas.

Otra muestra más que la mayoría de las personas, sin importar sus características, son bastante sensatas. Lástima que todo esto jamás se menciona cuando la prensa cubre hasta los más mínimos detalles de las protestas globalifóbicas.

¿Realmente benefició a México el TLC?

De acuerdo a un estudio del Carnegie Endowment for Internacional Peace, muy poco (el NY Times ofrece un resumen aquí). No he leído el original, pero me parece que la conclusión es un tanto equivocada.

En esencia, parece argumentar que los beneficios indudables en el sector industrial fueron contrarrestados por los perjuicios causados a la economía rural, sobre todo a la agricultura de subsistencia. Esto último no es tan descabellado: los precios internos de los productos agrícolas bajaron de forma muy importante en términos relativos, lo cual refleja una homologación parcial con los precios internacionales. No obstante, el crecimiento de la producción agrícola fue fuerte.

Esto sucede en todo el mundo: los avances en la productividad agrícola se reflejan en menores precios. Para tener un ingreso decente, el número de granjeros en el primer mundo ha caído dramáticamente. En otras palabras, cada granjero necesita trabajar más tierra para tener el mismo ingreso. A diferencia de lo que dicen los globalifóbicos, eso es bueno, ya que pagamos cada vez menos por la comida (lo cual beneficia desproporcionadamente a los pobres urbanos e incluso a los trabajadores rurales sin tierra propia).

En México, este avance no se ha dado por una razón bastante sencilla: la mayoría de la tierra agrícola es ejidal y es muy difícil venderla o darla como garantía para un crédito. De cierta forma, México es el único país donde el feudalismo no ha terminado de morir. Al igual que en la Edad Media, el campesiono mexicano está atado a la tierra, que es su principal activo, aunque intransferible. Al no poder vender quienes son poco competitivos, no tienen el capital para iniciar una nueva vida en la ciudad, algo que se ve agravado por el bajo nivel de educación que prevalece en el campo. La única válvula de salida es emigrar a Estados Unidos, donde los ingresos más altos compensan el riesgo.

Nada de esto es culpa del TLC. Pero lo que siempre se nos olvida es que el TLC fue la cereza en el pastel: mucho más importante fue el ingreso de México al GATT (organización antecesora de la OMC) en 1986. Fue a partir de ese momento, cuando se liberalizó el comercio exterior, que las exportaciones despegaron.

lunes, noviembre 17, 2003

Globalifóbicos y terrorismo

Para quienes nos jactamos de ser algo racionales, el movimiento globalifóbico es un misterio. A final de cuentas, pese a sus horrores, la humanidad avanzó más en el siglo XX en términos de condiciones materiales y expectativa de vida que en toda su historia previa. Estos avances coincidieron con la consolidación de la democracia y del capitalismo con sentido social. A partir de la Segunda Guerra Mundial, la apertura comercial ha sido la piedra angular de nuestra creciente prosperidad (no es coincidencia que África, India, Medio Oriente y, hasta cierto grado, América Latina son las regiones más cerradas al comercio y las que menos han avanzado).

Los globalifóbicos ven todo esto al revés. Parecen, en la medida en que pueden decir algo coherente, que el libre comercio perjudica a los pobres (pese a que en China se ha presentado la reducción más drámatica en la pobreza en la historia de la humanidad desde que abrieron su economía), destruye el medio ambiente (pese a la devastación ambiental en los países comunistas) y acaba con las culturas nativas (un buen indígena es un indígena pobre). Cada quién tiene derecho a tener su propio punto de vista, pero nada de lo que dicen es respaldado en lo mínimo por evidencia. Es más, lo único que quieren y proponen es destruir a las organizaciones multilaterales (como la OMC) que son esenciales para fomentar el comercio internacional. Dan la impresión de que quieren que el mundo regrese a una especie de estado fuedal pastoralista, sin comercio, sin las satánicas multinacionales, donde los campesionos puedan practicar agricultura de subsistencia sin ser molestados y con todos viviendo en sociedades aisladas de las terribles influencias culturales externas.

Todo esto viene al caso por este perfil, publicado en el NYTimes, de una activista que organiza las manifestaciones como las que veremos en Miami en los próximos días (a propos de la cumbre ministerail del ALCA). Toda una vida dedicada a protestar, pero, ¿con qué propósito? A esa mujer parece que ni siquiera le pasa por la mente cuestionar por qué hace lo que hace. En ese sentido, los globalifóbicos son una nueva manifestación nihilista. Quieren destruir por destruir, aunque pretenden luchar por la justicia. Va sin decir que si alguna vez triunfan, condenarían a muerte a cientos de millones de personas y reducirían el nivel de vida de todos.

En ese sentido, su visión tiene bastante en común con los extremistas islámicos que quieren destruir a Occidente y regresar al Califáto musulman que dominó el Medio Oriente hace mil años. Osama y Cía. no proponen nada para mejorar la humanidad. Simplemente quieren que el Islám ocupe la posición dominante que tenía hace siglos. Afganistán bajo los Talibanes ofrecía un buen ejemplo de qué sucedería si triunfan: la humanidad perdería más de siete siglos de avances en todo ámbito.

Pues lo lógico ya está sucediendo. Terroristas y globalifóbicos empiezan a unirse. Andrew Sullivan pronostica que esa alianza crecerá y se profundizará. En sus palabras: "Comparten un odio de la libertad en Occidente, un anti-semitismo profundo y una hostilidad implabable contra el capitalismo." Estoy de acuerdo: no me extrañaría que en uno de sus famosos mensajes grabados, Osama bin Laden empiece a criticar la globalización.

viernes, noviembre 14, 2003

Avances pequeños pero importantes

Casos como Enron, Tyco y Worldcomm, entre otros, muestran qué tan importante es el gobierno de las empresas. Si bien en México está lejos de ser perfecto, es muy altentador que en este ámbito las autoridades impulsaron cambios legales antes de que esos escándalos estallaran y, como consecuencia, ninguna empresa mexicana ha sido seriamente cuestionada. Esta nota ofrece una perspectiva sobre el grado de acatamiento de las empresas a las normas sobre gobierno corporativo. La conclusión: la mayoría cumple, pero falta mucho por hacer.

De hecho, los principales problemas que siguen existiendo en esta materia son legados del pasado, cuando era muy sencillo que las empresas dividieran su capital en acciones con voto (o muchos votos) para el grupo/familia controladora y acciones sin voto para el público inversionista. Esto permite que el grupo controlador pueda aprobar medidas que favorecen a sus intereses (sobre todo cuando controlan a toda una serie de empresas) y perjudican a los demás accionistas. El caso clásico es TV Azteca, controlada por Ricardo Salinas Pliego pese a tener menos de la mitad de las acciones, que forzó a todos sus accionistas a financiar a Unefón, una telefónica en donde Salinas Pliego tiene una participación importante.

Cultura e Impuestos

Este editorial ofrece una perspectiva mucho más sensata sobre este tema comparada con la serie de insultos, descalificaciones y lamentos que nuestros "intelectuales" han vertido en días recientes. No estoy necesariamente de acuerdo, pero es de celebrarse que haya personas pensantes en este país (a veces lo dudo).

LyFC: El barril sin fondo

Ayer escribí sobre el desastre que es la Cia. de Luz y Fuerza del Centro (ir hasta la parte inferior de la página), desde un punto de vista financiero. En esta nota, publicada hoy, se menciona que el subsidio solicitado para LyFC en el 2004 excede el presupuesto combinado de las secretarías de Gobernación, Relaciones Exteriores, Economía, Trabajo y Reforma Agraria. Y todo para pagar las pensiones actuales y futuras de 35 mil trabajadores sindicalizados.

jueves, noviembre 13, 2003

¿Demasiada inflación?

Con toda justicia, en México celebramos que la inflación e ubicó en menos de 4% en los últimos doce meses, algo que no se había logrado en décadas. La meta de Banco de México es bajarla a 3% el año entrante y hasta más en el mediano plazo, con el objetivo que tengamos una inflación similar a la de nuestros socios comerciales. ¿Quieren saber algo curioso? Es bastante probable que la inflación ya esté en 3%. ¿Cómo? Muy fácil: tendría ese nivel si la midieramos como en Estados Unidos.

En México, el cálculo de la inflación es sencillo: simplemente se revisa cada quincena el precio de toda clase de productos y servicios y se calcula la variación con respecto al periodo anterior. Pero que tal si imaginamos que hoyun cierto producto tiene un precio de 10 pesos y, gracias a avances tecnológicos, el siguiente año es dos veces mejor (digamos, un microondas que cocina más rápdio y gasta menos energía), pero cuesta igual. De acuerdo a Banco de México, la inflación en ese caso sería cero. Pero en Estados Unidos sí se toman en cuenta las mejoras en calidad, de tal forma que si es dos veces mejor, en realidad su precio bajó 50%.

En ese sentido, al no tomar en cuenta las mejoras en calidad, la inflación en México (y en otros países donde tampoco se hacen esos ajustes) es mayor a la que debería ser. Veamos un caso concreto. En Estados Unidos, el precio ajustado por calidad de las computadoras cayó 27% entre julio del 2002 y septiembre de este año. Tomando esos datos estadounidenses y añadiendo la depreciación del peso ante el dólar en ese lapso, el precio de las computadoras en México debió caer 18% en ese lapso. Pero las cifras de Banco de México indican una caída de tan sólo 2%.

Hay muchos otros productos cuya calidad ha mejorado significativamente en los últimos años (toda aparato electrónico, automóviles, servicios como telecomunicaciones, etc) y que ocupan una porción cada ves mayor de nuestro gasto. Al no ajustar los precios por calidad, Banco de México crea la impresión de que la inflación es mayor a la real, lo cual tiene toda clase de consecuencias (de entrada, contribuye a que las tasas de interés sean más altas de lo que podrían ser).

Claro, hacer los ajustes por calidad no es fácil e implica cierta subjetividad, pero en Estados Unidos hay trabajo muy serio de investigación que ha creado una metodología bastante sólida. Deberíamos usarla, ya que el objetivo real de las estadísticas es ofrecernos una visión lo más precisa de la realidad.

Regresan los espíritus animales

Vale la pena leer esta nota de The Economist, donde analiza la coyuntura actual de la economía estadounidense desde una perspectiva micro y sectorial. El tono es muy optimista.

El apagón financiero: Luz y Fuerza del Centro

Hace unos días publiqué un análisis financiero de la Comisión Federal de Electricidad. En esencia, se trata de una empresa rentable, pero cuyos pesados compromisos financieros (deudas) y laborales (pensiones) limitan su potencial de crecimiento. Pero en este país hay otra empresa estatal de electricidad: la Cia. de Luz y Fuerza del Centro, que atiende a la zona metropolitanda de la Ciudad de México y algunas áreas vecinas.

LyFC es un desastre andante. En el periodo enero-agosto del 2002 (últimas cifras que encontré), vendió casi 15 mil millones y sus costos operativos sumaron alrededor de 18 mil millones de pesos. A esto hay que agregar el costo de las pensiones (10 mil millones). Es una auténtica máquina de perder dinero y abosrbió en este periodo subsidios públicos por 8 mil millones. ¿Se me olvidó mencionar que sus pasivos exceden a sus activos y que su pasivo laboral asciende a 46 mil millones?

La verdad es que algo se tiene que hacer con este desastre. La problemática de LyFC no se puede solucionar con una reforma eléctrica: en esencia, es necesario cerrar este barril sin fondo, liquidar sus pasivos y transferir la infraestrucutra a CFE. A final de cuentas, LFyC casi no genera electricidad por su cuenta (más del 90% de sus ventas es electricidad que compra a la CFE). Lo difícil: cómo solucionar el problema de sus pasivos laborales, que suman a valor presente 1.2 millones de pesos por empleado (37,000 en total).